lunes, 28 de noviembre de 2011

Recetas de pasta

Pasta salteada con frutos secos:


 Lista de ingredientes para 2 personas:

            - 200 gramos de pasta
            - 2 tomates
            - 1 cebolleta
            - 1 pimiento verde
            - 1 diente de ajo
            - 50 gramos de almendra picada
            - 50 gramos de cacahuetes
            - 50 gramos de maíz frito
            - perejil picado
            - aceite virgen extra
            - agua, sal, azúcar

La preparación es la clásica, poner a calentar agua en una cazuela con un chorrito de aceite y cuando esté a punto de hervir vertemos la pasta.

Ahora picamos el ajo, cebolleta y pimiento. Lo pochamos en la sartén y agregamos los tomates troceados. El maíz lo trituramos con una batidora, y los frutos secos los tostamos en la sartén.

Ya está listo para mezclar con la pasta, aliñar, y a la mesa.



Tallarines al pesto:


 




Lista de ingredientes para 2 personas:

-       350 gramos de tallarines
-       unas ramitas de albahaca
-       2 dientes de ajo
-       un puñado de piñones
-       3 cucharadas de queso parmesano rallado
-       1 vaso de aceite de oliva, sal y pimienta.

Dispón en el mortero las hojas de albahaca, los ajos y los piñones y machaca todos los ingredientes hasta que veas que se forma una pasta.

Salpimenta el preparado e incorpora el queso rallado, mezclalo bien y añade poco a poco el aceite hasta que veas que tiene la consistencia de una salsa espesa.

Cuece los tallarines con abundante agua y un poco de sal, cuando veas que están al dente, escúrrelos e introdúcelos en una ensaladera o fuente, seguidamente, rocíalos con la salsa que preparaste, mezcla bien para que la pasta adopte los sabores de la salsa y ya los puedes servir.

Dales un toque final adornándolos con unas hojitas de albahaca y algunos piñones enteros.



Lasagna de pollo y champiñón:




Lista de ingredientes 2 personas:

-       1 Paquete Láminas Lasagna (3 por pax.) 
-       4 filetes de contramuslo de pollo 
-       200 Gr. Champiñones 
-       4 cucharadas tomate frito
-     Bechamel:
2CS de harina
3CS de aceite
Leche hasta espesor deseado.
Queso rallado
Orégano, sal, pimienta blanca y nuez moscada. 

Cortamos el pollo en tiras finas y lo salteamos en un poco de aceite, cuando esté casi hecho, añadimos el champiñón laminado de forma que se terminen juntos, añadimos orégano y sal.

Hacemos por otro lado la bechamel: ponemos en una sartén el aceite, al poco añadimos la harina y removemos para que se mezcle bien, apartamos del fuego para que se atempere, lo volvemos a poner al fuego y añadimos la leche a punto de hervir, poco a poco sin dejar de mover y esperando a ver el punto de espesor que queremos conseguir, cuando probemos la misma y no sepa a harina cruda, añadiremos sal, nuez moscada y pimienta al gusto.

Añadimos al salteado dos cucharadas de bechamel y otras dos de tomate, con la pasta cocida, ponemos en la bandeja una cucharada de tomate, una capa de pasta, el salteado, otra de pasta otra de salteado, pasta y napamos con la bechamel, ponemos el queso rallado y gratinamos.



Tortellini con espárragos:





Lista de ingredientes para 2 personas:

-       200gr de tortellini rellenos de lo que más te guste
-       Un manojo de espárragos
-       Tomate natural triturado
-       vino blanco
-       Sal
-       Aceite de oliva
-       Pimienta negra

Corta los espárragos en rodajas finitas. Sofríelos en aceite de oliva y pon una pizca de sal.

Añade vino blanco, deja que reduzca e incorpora el tomate natural. Añade pimienta negra y deja hervir a fuego medio unos minutos.

Hierve los tortellini en agua con sal. Mantenlos el tiempo que indique el paquete y escúrrelos. Mezcla con la salsa y sirve con un poco de parmesano rallado.



Ensalada de Pasta y Queso de Cabra:





Lista de ingredientes para 2 personas:

-       250 gr. de pasta de su preferencia. 
-       250 gr. De queso de cabra. 
-       3 pimientos rojos. 
-       2 dientes de ajo. 
-       5 cucharas de aceite de olivo. 
-       2 cucharas de albahaca fresca picada. 
-       3 cucharas de perejil fresco picado. 
-       Sal y pimienta.
Colocar los pimientos cortados a la mitad y previamente lavados y desvenados en un plato para horno y se hornea por unos 45 minutos a 200ºC, dándoles la vuelta a medio tiempo. Se retiran del horno y se dejan enfriar. Luego se pelan y se cortan un tira finas.

Se cortan finamente los dientes de ajo y se hacen dorar en un sartén con un poco del aceite de oliva.

En un recipiente se mezclan las hierbas, con el ajo y lo que sobra del aceite.

Cortar ahora el queso de cabra en cuadritos y añadirlo al aceite con ajo y hierbas. Haga cocer sus pastas según las instrucciones del fabricante para que queden al dente. Escúrralas bien para que no tengan agua y déjelas enfriar.

Vierta ahora sobre las pastas la mezcla de aceite, ajo, hierbas y queso de cabra, y termine con las tiras de pimiento rojo.

Finalmente ponga un poco de sal y pimienta negra al gusto. Se puede servir con un vino blanco frío.


Fuente: Petitchef, cocina.enfemenino, recetario-cocina

lunes, 17 de octubre de 2011

Cómo cocinar los distintos tipos de pasta

Existen centenares de tipos de pasta y tan importante es la cocción de la pasta como su aderezo, a pesar de que la materia prima pueda ser la misma, cada tipo de pasta, por su forma y su tamaño, se expresa mejor si se acompaña de un tipo de salsa que se adapte a ella.

Hay pastas lisas, acanaladas, largas, cortas, tubulares… una salsa menos densa quedará en las hendiduras de la pasta acanalada por ejemplo, mientras que si esa salsa líquida la sirves con unos espaguetis, obtendrás un plato de espaguetis con una sopa de salsa.

Si la salsa se hace con verduras, carne, marisco, etc, al tener trocitos, combina a la perfección con la pasta corta, sea o no hueca  (hay recetas que llevan la contra a la teoría, como los espaguetis con almejas, la variante para mejorar el plato, serían los fideos).

-    Pastas largas tipo tallarines: salsas calientes de tomate, verdura o hierbas, salsas blancas con crema de leche o similar, salsas de pescado o marisco y aliños de aceite de oliva aromatizado.

-    Pastas gruesa y corta, es ideal un aderezo de salsas de carne y de verduras, como un ragú de ternera, de carne con setas, etc.

-   Pasta plana y corta, mejora las salsas cremosas con queso o requesón, nata o purés.

También podemos jugar con los colores de la pasta, que además de aportar distintas vitaminas, ofrece presentaciones y combinaciones que entran por los ojos.

A más densidad de la salsa a emplear, más ancha debe ser la pasta a utilizar. También cuanto más grasa sea la salsa - o aceitosa - más larga ha de ser la pasta ya que ese mismo unto permite recoger con más facilidad toda la longitud. La única excepción a esta regla empírica son los espagueti y los tagliatelle que se pueden combinar con cualquier tipo de salsa.

 
Conchiglie : pasta que se sirve con diferentes tamaños. Las pequeñas retienen muy bien las salsas mientras que las grandes se emplean para rellenar y gratinar.  





Cannelloni : tubos de pasta que se rellenan al gusto y cubren con salsa antes de ser gratinados.



Farfalle : el nombre deriva de la palabra "farfalla", mariposa en italiano. Se utilizan principalmente con salsas cremosas y con tomate, las hay teñidas con verduras. 





Fettuccine : el nombre significa literalmente "cintas". Se utilizan con salsas densas.



Fusilli : forma de sacacorchos y gracias a ello retienen muy bien las salsas cremosas de leche o nata. Son muy populares las variedades teñidas de colores.  




Lasagna: placas de trigo duro que se alternan en capas de carne picada o verduras, generalmente y luego hornean con alguna salsa.




Linguine : son como los spaghetti pero de forma plana. Prácticamente siempre se emplean con salsa pesto o con adición de frutos del mar.





Makkaroni: se puede decir que es muy similar al penne (lo que en España llamamos macarrones) y al rigatoni sólo que nunca se suele añadir huevo en su confección. Se emplea con salsas de todo tipo.



Penne : en España y otros países se denomina "macarrones". Se hacen rallados o lisos, siendo los primeros adecuados para salsas poco densas.






Ravioli : se trata de pequeñas bolsitas de pasta rellenas de carne, verduras o queso. Se suelen servir con salsas ligeras como el pesto o con tomate.




Rigatoni: se pueden emplear con cualquier tipo de salsa.







Spaguetti: es una de las pastas más antiguas y populares del Mundo, originaria del sur de Italia. Casan bien con muchos tipos de salsa. Los tipos más finos se conocen como spaghettini y vermicelli que casi con las mismas propiedades permiten cocciones mucho más rápidas.




Tagliatelle : Se suelen servir con salsa boloñesa. Es bastante corriente teñirlas con verduras y se suelen comercializar como una cinta enrollada formando "nidos".





Tortellini : es una pasta tubular con forma de anillo que se rellena de carne, queso o verduras. Se puede servir simplemente con mantequilla o salsas cremosas incluso incorporada a sopas, caldos o estofados. Es correcto gratinarlos.


Fuente: Gastronomía&cía, Mediahoradecocina.


En la próxima entrada encontraréis varias recetas para que practiquéis en casa, fáciles, rápidas y para toda la familia! ;)

martes, 11 de octubre de 2011

Propiedades de la pasta

Las pastas constituyen uno de los alimentos más completos y recomendables en el conjunto de una alimentación sana y equilibrada. Esto unido a la capacidad de conservación de la pasta, su fácil preparación culinaria y la enorme variedad de platos que se pueden preparar con ella, son razones más que suficientes para justificar su consumo.



El procedimiento habitual de la pasta es el industrial, que consta de las siguientes fases:

- Obtención de la sémola: Después de poner el trigo duro a remojo, para eliminar más fácilmente el salvado, se tritura de forma gruesa.

Preparación de la masa. No debe fermentar y para evitar que se formen burbujas de aire que debilitan la pasta (venteado) la masa se somete al vacío.

- Extrusión de la masa: Consiste en hacerla pasar a presión por unos moldes que le dan su forma típica.

- Secado y endurecimiento: Cada tipo de pasta necesita un tiempo de secado, en función de su grosor.

La pasta más sencilla, hecha a base de harina de trigos duros y agua, contiene aproximadamente:

-       75 a 77% de hidratos de carbono
-       12% de proteínas
-       1% de grasa
-       10% de agua y minerales. 


100 gramos de pasta aportan unas 365 kilocalorías.

El bajo contenido en agua de la pasta permite una mejor conservación durante largo tiempo, especialmente si se mantiene en condiciones óptimas de empaquetado y almacenamiento (en lugares secos), impidiendo así que se alteren sus propiedades nutritivas y organolépticas.

Excelente fuente de hidratos de carbono no sólo por la cantidad que aporta a la dieta sino porque se trata de hidratos de carbono complejos, como el almidón, que le otorgan una lenta absorción proporcionando niveles estables de glucosa en sangre.

La proteína más importante de la pasta es el gluten que le confiere su característica elasticidad. La pasta se puede considerar como una fuente adecuada de proteína, aunque ésta sea deficiente en un aminoácido esencial, la lisina.

Su calidad proteica mejora considerablemente cuando la pasta se cocina acompañada de otros alimentos como huevo, leche y queso.

Su contenido mineral y vitamínico es escaso, apenas un poco de magnesio, calcio y fósforo y pequeñas cantidades de vitaminas del grupo B y ácido fólico, y depende del tipo de harina empleada.

En este sentido, el uso de harina integral permite aprovechar las ventajas que ofrece el salvado con un mayor aporte de vitaminas (preferentemente del grupo B y de vitamina E), así como de minerales y fibra insoluble que facilita el tránsito intestinal.

Naturalmente el valor energético y nutricional del plato depende asimismo de los otros ingredientes que acompañan a la pasta en su elaboración o preparación como carne, verduras, huevos, queso, setas.... El resultado final, un plato tan delicioso como nutritivo, de mayor contenido en proteínas, vitaminas y minerales y, sin duda, de gran interés gastronómico.

La pasta está especialmente indicada:

a) En estados en que se necesite un aporte extra de energía.

b) En la alimentación de las personas de edad avanzada, por su fácil digestión y asimilación.

c) En los deportistas, por su riqueza en hidratos de carbono de absorción lenta y no aportar casi nada de grasa. Además, por si fuera poco, ofrece más de un 10% de proteínas.

d) En personas con problemas de sobrepeso u obesidad, ya que la pasta como tal es un alimento saludable y versátil que no tiene por qué engordar. Aunque aún persiste la falsa creencia de que la pasta engorda, esto no es cierto, todo dependerá de los ingredientes empleados en la elaboración del plato y su consumo puede ser una alternativa muy saludable al consumo de platos ricos en grasas.

e) En diabéticos, porque la presencia de hidratos de carbono complejos favorece el paso gradual de la glucosa a sangre, manteniendo sus niveles estables.

f) En personas con niveles elevados de colesterol en sangre. Estudios científicos han demostrado que la pasta disminuye los niveles elevados de colesterol en sangre y favorece el funcionamiento normal del tiroides.

g) Contribuyen a prevenir el cáncer, especialmente el colorectal, ya que detienen el crecimiento celular y ayudan a la diferenciación y selección de las células dañadas para su posterior eliminación.

h) Los hidratos de carbono son el alimento básico del cerebro, por lo que el consumo de pasta ayuda a la prevención del Alzheimer.

No obstante, no se recomienda su consumo a las personas con intolerancia al gluten (enfermedad celiaca). Para este colectivo, la industria moderna también elabora pastas sin gluten.

Fuente: Alimentación sana, Pastas Gallo